CC.OO, y UGT hace muchísimo tiempo que son vocales de SCAI, entidad solidaria que surgió en 1998 para paliar una necesidad. Hacía ya muchos años desde la avalancha de inmigrantes de otros lugares de España a Catalunya, pero seguía siendo necesaria una entidad de ayuda al inmigrante. Y surgió precisamente el día en que un sindicalista sabadellense recibía, de manos del alcalde Farrés, la medalla al Mérito Social en nombre de todos los inmigrantes y de todos los ciudadanos que habían luchado para conseguir las libertades democráticas y un Sabadell mejor para todos.
Después de aquel acto, se propuso a todos los asistentes organizar una comisión ciudadana para atender a los inmigrantes españoles y también a los procedentes de otros países. Se puso a votación y, a los pocos días, se reunieron varias personas y la entidad “EMAUS”. Después, con dificultades, en un local cedido por nuestro Ayuntamiento, se abrió un despacho al público que empezó a atender a los inmigrantes que llegaban a nuestra ciudad. Acudieron los primeros voluntarios y más tarde se unieron otras entidades, como “La LLiga dels Drets dels Pobles”, y algunas más. Después se vio la necesidad de que participasen en este proyecto los sindicatos CC.OO. y UGT para poder atender temas burocráticos de permisos y papeleo. Fueron años de mucho trabajo por parte de todos. Llegaron inmigrantes sin documentación (hoy los llamamos sin papeles), sólo Cáritas de Sabadell prestaba alguna ayuda. Y fue entonces cuando EMAUS se propuso atenderlos y presentar un proyecto a nuestro Ayuntamiento y a otras entidades.
Como sindicalistas, hicisteis un buen trabajo. Estos últimos años se ha registrado una gran avalancha de inmigrantes, tantos que SCAI se vio obligado ampliar sus locales y personal de atención: en 1999 fueron atendidas unas 60 personas mientras que en el 2010 la cifra se aproximó a las 18.500.
SCAI, mediante sus voluntarios, ha organizado cursos de formación, enseñanza de español y catalán y cultura general. EMAUS, mediante una subvención, atiende a un grupo de inmigrantes dándoles cobijo y alimentación. Durante estos años, todo ha funcionado bien; no han faltado problemas, pero se han podido superar y seguir adelante.
Expongo estos hechos para que los ciudadanos sepan cómo y de qué manera se organizó SCAI. Estos días se han publicado en el D.S. unas informaciones sobre la retirada de las subvenciones, tanto a SCAI como a EMAUS.
Ahora este gran trabajo puede desaparecer por la retirada de las subvenciones municipales que percibíamos y por vuestro alejamiento de trabajar en la Comisión.
Si desaparece una entidad como SCAI, será una gran pérdida de valores. Sindicatos y Ayuntamiento sabéis muy bien que no se atenderá a estas personas como se ha venido haciendo hasta ahora y que quienes van a perder son los inmigrantes. ¿Quién cuidará de ellos cuando estén en la calle? ¿Y dónde estará nuestra dignidad como pueblo que siempre se solidarizó con los más desfavorecidos? La respuesta tendréis que darla vosotros. Cuando se pierde el sentido solidario, se pierde también libertad.
