Al parecer, ahora la gente que salimos de la ciudad a trabajar, estudiar, etc. nos convertimos de forma automática en infractores graves de las normas de tráfico.
Martes, día 15 de octubre, entre las 11 y las 12.30 horas de la mañana, en la calle Ronda Ponent, tras atravesar la Carretera de Terrassa, un nutrido grupo de ciudadanos nos saltamos, según la actuación arbitraria de la Policía Municipal (que, en teoría, está para ayudar) un semáforo en rojo, y en números de 3,4,5 vehículos a la vez, fuimos parados para hacernos entrega de la sanción (sólo 200 euros y 4 puntos menos).
En el momento en que yo estuve, había 4 vehículos, 2 de ellos saliendo, pero pararon a otros dos más, y detrás de mí, otros tantos. (Me imagino que se puede comprobar por el número de agentes y por el número ee denuncias).
¿Ahora todos, o un gran número de automovilistas, somos infractores? ¿Cómo se explica que todos los conductores lo negáramos? O lo que es peor… la Policía Municipal actúa como recaudadora de impuestos indirectos.
Estoy organizando una reunión informativa para decidir si es hora de actuar ante este tipo de atropellos. Los afectados e interesados pueden dirigirse a [email protected].
