Resultados

Parece confirmarse que la inercia negativa va quedando atrás y las cuentas del Banc Sabadell de lo que va de ejercicio denotan una sensible mejoría. Si en primer semestre se dejó atrás un  proceso de empeoramiento, que se alargó cinco largos años de travesía por el desierto de la crisis y la digestión del ladrillo, en el último trimestre se ha puesto de manifiesto un gran paso adelante que lleva a la institución a duplicar los resultados del pasado ejercicio. Es la lenta recuperación de resultados, un proceso de mejora que proseguirá en el futuro inmediato. El saneamiento no ha terminado, quiza no termina nunca, y el BS ha destinado a dotaciones, saneamientos y provisiones diversas, 1334 millones de euros, cifra que contrasta con el excedente de 186 millones. Ese cambio se ha logrado con una mora muy elevada, 12,6 %, la media del sector, y con una caída del margen de interés, la tradicional expresión de la actividad bancaria. En contrapartida, ha sumado grandes resultados de la actividad financiera, ha rebajado la cartera inmobiliaria y ha mejorado la eficiencia. El vaso puede verse medio lleno o medio vacío, pero es razonable pensar que lo peor ha pasado y que el BS enfoca la salida de la crisis con una capitalización elevada y con mayor cuota de mercado. Los años de plomo quedan atrás y será la rentabilidad del negocio la que marque el futuro de la entidad, el verdadero test al que se enfrenta el sector. No es sorprendente que el nuevo plan estratégico para el período 2014-2016 tenga como foco la rentabilidad, la búsqueda del paraíso perdido. Ese va a ser el referente de los próximos trimestres.