Aragonés y exzaragocista, Antonio Longás reconoce que el duelo del sábado (20h.) en La Romareda «es especial para mí porque yo iba con diez años como aficionado al campo y he jugado en todas las categorías». Sin embargo, esta vez sólo desea el triunfo arlequinado para mantener vivas las opciones de playoff. «Después de una temporada con altibajos y momentos muy complicados como el día del Jaén, ahora el equipo está en un buen momento. Conseguido el objetivo de la permanencia, nos hemos liberado y estamos ofreciendo nuestra mejor versión. ¿Cálculos? Es inevitable hacerlos. Sabemos que tenemos dos duelos directos en casa y hay que arañar algo fuera». También confía en el respaldo de la afición. «Que visiten el Pilar y luego vengan a apoyarnos al estadio. Ya lo notamos ante el Barça B en la Creu Alta y ojalá podamos continuar así hasta el final». De momento, en Zaragoza se calcula la presencia de medio millar de seguidores que se desplazarán en los tres autocares de la Federació de Penyes, vehículos particulares y la peña arlequinada La Plana. Se quiere repetir en La Romareda otro episodio histórico como el 0-3 de la temporada 85/86, entonces ante el filial, que fue el preludio del último ascenso a Primera División (el domingo se cumplen justo 28 años) con 7 mil aficionados arlequinados en las gradas.
