Resultadistas. El marcador fue lo mejor para un desconocido Sabadell ante la Pobla de Mafumet. Si en Cornellà quedó sin recompensa su magnífico segundo tiempo, esta vez se alió con la efectividad y sumó la segunda victoria por la mínima en la Creu Alta que le aúpa a la zona de playoff con 7 puntos. Bastó el tempranero tanto de Osado en el minuto 7 cabeceando a la red un centro de Pol Roigé, quien le robó la cartera al exarlequinado Víctor Espasandín en una acción que parecía sin trascendencia. Sería, de hecho, una de las pocas acciones relevantes del extremo arlequinado, en la línea gris y mediocre que ofreció el equipo de Miguel Alvarez. Sin duda, se convirtió en su peor encuentro en lo que llevamos de temporada aunque lo positivo es que fue capaz de amarrar la victoria, algo importantísimo también en esta categoría. La Pobla Mafumet se hizo dueño del balón desde el inicio y mantuvo su dominio hasta el final. Eso sí, mostrando una notable bisoñez en los metros finales, su talón de Aquiles. Y también chocó con la brillante actuación del meta Craviotto, providencial en varias intervenciones. Su mejor opción para el empate se produjo en el minuto 30 cuando Valentín salvó bajo palos un disparo de Gabi López que buscaba la red. La acción acabó en una insólita e inexplicable falta indirecta en el área por presunta cesión al portero. Increíble. No tuvo consecuencias. Paradójicamente, el Sabadell, aún jugando mal, gozó de hasta tres clarísimas oportunidades para sentenciar. El larguero rechazó un remate de Marc mientras el meta Varo se lució en un mano a mano con Forgas y un disparo de Forniés que luego Bruno no supo enviar a la red. La afición (acudieron 2.234 espectadores) acabó sufriendo aunque el triunfo endulzó algo el agrio partido de su equipo. La próxima cita será el sábado 19 en la Ciutat Esportiva Dani Jarque ante el Espanyol B (17h.). 
