Antonio Longás dio todo un recital en Zaragoza en su primer partido como titular esta temporada. Luchando contra el dolor de su rodilla, el aragonés se confirmó como el faro y cerebro del equipo arlequinado. «Tengo 30 años y quizá mayor peso en el equipo, pero yo sólo trato de aportar lo máximo en beneficio colectivo. En La Romareda todos hicimos un gran encuentro. Fuimos superiores y merecimos incluso algo más, pero lograr un punto con diez y en el último minuto da mucha moral», subraya. Ahora tiene claro que «en casa debemos hacernos fuertes como el año pasado y ante la Ponferradina toca sumar de tres en tres». Admitió que su lesión es un proceso «duro porque hay días que estás bien y otros en que vuelve a hincharse la rodilla. Toca adaptarse y hacerlo soportable». En cuanto a los rumores que en verano le situaban en Zaragoza, Longás fue rotundo. «Es cierto que contactaron conmigo, nunca con el club, preguntando por mi situación. Les expliqué que había renovado 2 años y me sentía muy feliz en el Sabadell. Mis intenciones son muy claras y nunca pensé en marcharme». Por otra parte, en la sesión de este miércoles tanto Collantes como Raúl Tamudo entrenaron con normalidad y podrían estar a disposición de Miquel Olmo de cara al choque del sábado (20h.) frente a la Ponferradina en la Creu Alta.
