Este fin de semana suena a trascendental para el Centre d´Esports Sabadell. En un doble frente. Sobre el campo, tres puntos vitales el domingo (17h.) en la Creu Alta frente al Albacete. Tras la ‘desfeta’ en Vitoria, los de Miquel Olmo necesitan resarcirse. El técnico confía en «la fuerza y cohesión del grupo» para salir del atolladero pese a la sensible baja de Antonio Longás que el martes pasará por el quirófano. Olmo insistía que «debemos ver el gran equipo de casa, saliendo a intimidar al rival desde el inicio». Mantiene dudas en el once y hombres como el joven Yeray o Javi Hervás tienen opciones de ser titulares ante un Alba que regresa a la Creu Alta 25 años después de cosechar un inolvidable 0-4 en plena etapa del famoso ‘Queso Mecánico’ de Benito Floro. Por otro lado, en los despachos la llegada del presidente Keisuke Sakamoto abre toda clase de expectativas ante los muchos temas pendientes, algunos muy delicados como la deuda a Hacienda. El lunes habrá reunión del Consejo y el socio y accionista arlequinado espera tener respuestas por parte del máximo accionista, en especial sobre sus intenciones de futuro.
