Sin sorpresa. Claudicó el Sabadell de manera inapelable, incluso dolorosa. Fue un trago muy amargo para los hombres de Miquel Olmo ante, eso sí, un gran rival. El Sevilla pasó por la Creu Alta (acudieron algo más de 6 mil espectadores) como un auténtico rodillo, justificando su coliderato de la Liga BBVA. Un ‘hat trick’ de Iago Aspas junto a los tantos de Kolo, Reyes y Gameiro dejaron un marcador de escándalo (1-6), con la única respuesta del joven Ernest Forgas que se estrenaba así con el primer equipo. Sólo media hora resistió el equipo de Miquel Olmo. Incluso tuvo alguna opción de adelantarse (remate de Sotan), pero en la recta final del primer período bastaron una acción de estrategia y una genialidad de Iago Aspas para desequilibrar. Tras el descanso llegó el ciclón sevillista. El equio de Emery fue un rodillo implacable, sin dar la menor opción a un conjunto arlequinado que bajó los brazos. Un trago amargo en la Copa y ahora tocará centrarse de lleno en la Liga, con la visita el sábado del Mirandés.
