El avance de las obras del carril bus-VAO (vehículos de alta ocupación) obliga a la adopción de más restricciones en la circulación por la autopista C-58. Desde esta semana y hasta finales de junio, y en dos fases, quedarán cerrados los accesos hacia Ripollet y Montcada. Con anterioridad existían otras alteraciones, así como limitaciones de velocidad en el tramo de Montcada i Reixac tanto por la C-58 como por la N-150. Hasta el próximo otoño los tres carriles de entrada a Barcelona por la autopista están señalizados a 60 por hora en un tramo de 300 metros, ya que se han estrechado. Las previsiones del Departament de Territori i Sostenibilitat de la Generalitat indican que la construcción de este vial concluirá el próximo mes de diciembre, aunque no entrará en servicio de forma inmediata.
