La curva de la carretera de Caldes, a la salida de Sabadell, dejará de ser un punto negro del tráfico con las obras de ampliación del giro. El objetivo es hacer esta vía más segura. La actuación afecta a 300 metros de longitud.
La curva de la carretera de Caldes, a la salida de Sabadell, dejará de ser un punto negro del tráfico con las obras de ampliación del giro. El objetivo es hacer esta vía más segura. La actuación afecta a 300 metros de longitud.