Cara y cruz para el Club Falcons. Por un lado, el equipo masculino consiguió el anhelado ascenso a la División de Honor en la fase disputada en La Zubia. Por otra, se consumó el descenso de las féminas en la Superdivisión tras combinarse su derrota ante el Arteal (4-0) con el triunfo del School aragonés frente al Irún (4-2). En tierras granadinas, tras caer ante el anfitrión en la eliminatoria de campeones, Falcons se enfrentó al CTT Badalona. Fue un choque igualado aunque la experiencia de Weisz y Clivillé se impuso al joven jugador del CAR, Adrián Fernández. Con 2-0, Navarro recortó ganando a Brugada en un gran partido en 5 sets. Clivillé puso el 3-1, volvió a dar emoción Navarro y todo quedó por decidir en el último partido entre el hispano-francés Miranda y Ferràn Brugada. Aunque cedió en el primer set, el sabadellense desplegó su mejor juego y ya no daría ninguna opción imponiéndose 11-5, 11-6 y 11-2 para certificar el merecido ascenso a la División de Honor, la categoría de plata del tenis de mesa estatal. 
