– Yolanda Rico –
Los atentados yihadistas han influido en el crecimiento progresivo de las conductas discriminatorias contra la población musulmana. Con el propósito de prevenir este tipo de actitudes, el Ayuntamiento organizó el pasado fin de semana una jornada que invitó a la población a conocer de cerca cómo vive la comunidad musulmana de Sabadell.
Es necesario abordar el problema de la islamofobia para prevenir la discriminación» de las personas que practican el Islam. En estos términos se refiere Míriam Ferràndiz, concejala de Drets Civils i Ciutadania, a la jornada que el sábado congregó a un centenar de personas en el Casal Pere Quart para analizar y debatir sobre la islamofobia y el terrorismo de DAESH.
Los debates contaron con la asistencia de expertas como Dolors Bramon, Doctora en Filosofía y Letras, profesora del Institut de Ciències Religioses de Barcelona, especialista en teología, historia y sociedad musulmanas; Hayar Adderahman, trabajadora social y doctorada en Derecho; y Fatiha El Mouali, licenciada en Ciencias Económicas y portavoz de la Plataforma Unitat contra el Feixisme i el Racisme a Catalunya, y el periodista sabadellense Antonio Santamaría, entre otros.
Tras la sesión, los asistentes se desplazaron hasta la mezquita de Ar-risalah de Can Puiggener donde compartieron una comida, preparada por miembros de la comunidad musulmana a base cous cous con carne y verduras.
La comunidad musulmana de Sabadell está integrada aproximadamente por unas 6.000 personas. Los practicantes del Islam cuentan con cinco mezquitas distribuidas por diferentes barrios de la ciudad. Hasta ahora existe una estrecha colaboración entre los responsables de los centros de culto, las fuerzas de seguridad y el Ayuntamiento. Sin embargo, musulmanes como Lamine Souane, presidente de la Federación de Asociaciones de Inmigrantes del Vallès (FAIV), temen que el progresivo crecimiento de la islamofobia pueda poner en riesgo su seguridad.
«El problema no parece que pueda tener una solución rápida si los delincuentes islamistas no detienen sus matanzas», opina Souane quien advierte que «no podemos tolerar el terrorismo ni tampoco los comportamientos discriminatorios hacia los musulmanes que no tienen nada que ver con los atentados». Aunque no le constan agresiones contra personas musulmanas sí reconoce que algunas mujeres no han podido acceder a un trabajo por llevar velo.
El Ayuntamiento explica que «en estos momentos, en toda Europa políticos de extrema derecha, xenófobos y populistas, aprovechan el eco mediático del terrorismo yihadista para propugnar su discurso de odio, la discriminación hacia la población musulmana y hacia la población extranjera en general, promoviendo acciones que afectan a la convivencia y la cohesión social».
