Que si el quitanieves, «Busi» o el pulpo. Cefalópodos y otros apelativos cariñosos aparte, si por algún rasgo extradeportivo se conoce a Sergio Busquets es por sus orígenes. Badia del Vallès lo lleva en la sangre, una característica que exterioriza a la mínima oportunidad. El centrocampista de «la Roja» y uno de los baluartes del Barça de Guardiola se ha convertido, en poco tiempo, en la principal seña de identidad de la localidad. Estigmatizado durante años, el pueblo que desde el aire se asemeja a la península ibérica presume ahora de deportista. Algunos ya la denominan Busquets del Vallès.