Arxiu

Pasarela

Raramente las comparecencias públicas y las comisiones de investigación responden a los objetivos para los que se crean. La presencia en el Congreso de personalidades que tenía que ayudar a esclarecer algunos desastres poco explicables, no sirvió para casi nada. El último espectáculo, un desfile de políticos y gestores, les brindó una oportunidad para sacarse las pulgas de encima y renunciar a cualquier atisbo de autocrítica.
Los que comparecieron ante la comisión económica del Parlamento recurrieron a la misma estrategia de comunicación: explicar su papel, desviar responsabilidades a terceros, circunscribir su acción a un contexto distinto del actual y no asumir el ingrato papel del chivo expiatorio. Y, por supuesto, dejar sin respuesta las preguntas más incisivas y molestas. Al final, lo que queda es el reconocimiento de algunos errores, poco menos que accidentes, que no son la causa de un desaguisado que les resulta lejano.

Además, el descalabro Bankia se ha difuminado con la participación de algunos artistas invitados, que también han tenido algo que ver con el desastre que ha dejado en cuadro a las cajas de ahorros. No desfilaron por la pasarela todos los que han sido, pero sí han sido todos los que pasaron. Y pasaron para dejar testimonio de lo que les ha interesado y sembrar muchas dudas sobre el chapapote financiero-inmobiliario, bendecido por auditoras renombradas.
El balance del desastre está por escribir y se tardará lo suyo en evaluar el alcance real de los daños causados. Lo que es seguro es que la comparecencia y declaraciones de los convocados no servirá de mucho.

Comentaris
To Top