En el pleno municipal celebrado el día veintiuno de febrero, se ha consumado la venganza de los sectores que un día se unieron, a pesar de sus fobias, para dar continuidad a los veinte años de gobierno de Antoni Farrés. Esos sectores no han perdonado que Manuel Bustos tuviera la osadía de arrebatarles democráticamente el gobierno local, y desde entonces comenzaron una persecución sin importar los métodos. La Historia está llena de ejemplos de cainismo en la izquierda política, y así nos va a la parte más débil de la sociedad.
Fueron los grupos políticos que se sitúan más a la izquierda los que tuvieron las palabras de despedida más duras, sobre todo Marisol Martínez (EUA) y Virginia Domínguez (ES), para la etapa de gobierno de Manuel Bustos, como si hubiera sido, según ellas, una etapa de catorce años perdidos para la ciudad. Ignoraron por qué Manuel Bustos ha ganado mayoritariamente cuatro elecciones continuas a gran distancia de la formación política más inmediata.
Para expresar tal dureza e ignorar los logros, hay que actuar de muy mala fe y olvidar que, en estos catorce años, Sabadell se ha dotado de una red de bibliotecas, polideportivos, plazas de guarderías, Centros de Atención Primarias, (CAP), centros para atención a la tercera edad, la, los servicios sociales han aumentado permanentemente, se han reformado todas la plazas públicas con mobiliario moderno y conforme a las nuevas normas europeas; se ha ampliado la red de de transporte público, y se trabaja por iniciativa de Manuel Bustos en el Metro de Sabadell, cuando en época anterior nadie soñó con la posibilidad de que este servicio podría llegar al norte de la ciudad con cinco estaciones, cuya transformación ya ha llevado a eliminar las barreras arquitectónicas de la estación de RENFE en la plaza España; se ha ampliado la red de Centros Cívicos; no ha podido terminar, pero ha dejado en estado muy avanzado las rondas de circunvalación, de vital importancia para descongestionar el centro de la población. El 1999, cuando Bustos alcanzó la alcaldía, Terrassa disponía un amplio tanatorio con crematorio incluido, donde se incineraban los difuntos de Sabadell, aquí en Sabadell, lo ha inaugurado recientemente. Podría continuar, pero no caben en este espacio las muchas actuaciones realizadas por el gobierno encabezado por Manuel Bustos.
No tener en cuenta todo este balance a la hora de la despedida de catorce años de gestión, como han hecho algunos grupos de la oposición, dice mucho de la baja talla de algunos.
Para terminar, y desde mi mayor respeto a la figura de Toni Farrés, como siempre le manifesté, aunque no lo votaba, los que se consideran herederos de aquellos veinte años de gobierno nos lo quiere poner como el alcalde de todos los sabadellenses y olvidan que, en las cinco elecciones que tuvo que superar, el 50% de la ciudad nunca le votó, pero contó siempre con el respeto democrático a los resultados de las urnas, consideración que algunos no ha sabido tener en cuenta cuando sus preferencias no han coincidido con la voluntad popular del sufragio universal.
