Con la cabeza alta. El Sabadell dijo adiós a la Copa Catalunya tras sucumbir 1-2 ante el Espanyol en las semifinales disputadas en el estadio Montilivi gerundense, prácticamente vacío. Con los hombres menos habituales en la Liga-a última hora se cayeron de la lista Arteaga y Tamudo por molestias físicas- el conjunto arlequinado plantó cara a los de Javier Aguirre, entre ellos el exarlequinado Manuel Lanzarote. Los primeros 25 minutos fueron un tedio absoluto, sin chispa ni ritmo. Sin embargo, en 4 minutos anotó dos tantos el Espanyol, por mediación de Córdoba y Pizzi, éste en posición más que dudosa. Incluso De Navas evitó el tercero en una fase de desconcierto defensivo arlequinado. En ataque sólo cabe destacar un remate de Gato al borde del descanso. Cuando todo parecía sentenciado, el arranque del segundo período sería fulgurante por parte sabadellense. Avisó Toni Lao con un remate que paró Germán y otro lateral que ejerció de carrilero, Carlos Clerc, aprovechó un buen centro de Gato para fusilar a Germán. Curioso: le marcó a su club. El gol dio alas al Sabadell, que rozó el empate en el minuto 72 en un cabezazo a bocajarro de Carlos Hernández que conjuró el cancerbero espanyolista. También De Navas salvó la sentencia en un par de ocasiones. El colegiado, por otra parte, perdonó la roja directa a Córdoba tras agredir a Jesús Olmo. En la recta final, Miquel Olmo tuvo el buen detalle de dar oportunidad a los jóvenes del B. De entrada salió Agustín y posteriormente aparecieron Joan Noguera, Aleix Domínguez, Joan Luque y Estellés, todo un premio para ellos. A partir de ahora, el Sabadell ya puede centrarse en la Liga y en ese apasionante duelo del próximo sábado en La Romareda ante el Real Zaragoza. Está asegurada la presencia de muchos seguidores sabadellenses pues la Federació de Penyes ha confirmado ya tres autocares cubiertos y pueden añadirse algunos más. 
